Protégete con vitaminas y minerales en invierno
El invierno es sinónimo de fiestas, de frío y de nieve… también de muchas comidas y macros, ¿y las vitaminas y minerales?…
Si bien hay mucha diversión en vacaciones o en la temporada navideña, los atletas deben tomar en cuenta las vitaminas y minerales para confrontar las desventajas del invierno, que además duro por su clima trae consigo menor exposición a la luz (días más cortos), piel seca y curtida, sensación de falta de energía o, incluso inflamaciones de las articulaciones o los dolores estacionales.
Para mantenerte saludable este invierno, debes centrar tu atención en obtener algunos micronutrientes específicos, que podrían ayudarte a escapar de estos efectos negativos
En definitiva, necesitas reorganizar tu lista de compras a medida que se acerca el año nuevo y llenar tu alacena con alimentos y complementos nutricionales ricos en vitaminas y minerales.
Pero, ¿por qué los necesitas en invierno?
Las vitaminas y los minerales son nutrientes esenciales que necesita tu organismo para un funcionamiento óptimo y para mantenerte sano.
- Aunque estos nutrientes son necesarios en cantidades relativamente pequeñas, garantizan que te mantengas saludable y libre de enfermedades,
- Además, en invierno experimentas más estrés por los cambios de temperatura, lo que te hace más susceptible a varias afecciones.
Hoy analizaremos algunas vitaminas y minerales que son esenciales para tu organismo. Sin duda debes poner más énfasis en ellos mediante una prueba analítica… mejor si lo tienes lo antes posible…
La vitamina D en invierno
Su deficiencia produciría un «trastorno afectivo estacional», pero puede expresarse tanto de manera física como mental.
Este trastorno se ha relacionado con la obesidad, pero la debilidad muscular y el dolor óseo son síntomas potenciales si no la tienes a niveles ideales.
- Cómo tomar la vitamina D: usarla en un rango de 2.000-4.000 UI para asegurar niveles adecuados, y combinarla con magnesio para aumentar la absorción.
El magnesio no falla
Este mineral es esencial en el proceso de contracción muscular, además se relaciona con los buenos niveles de fuerza general para gestionar para la función muscular.
El magnesio también puede ayudarte a mantenerte regular, desde el equilibrio de electrolitos y mejorar la calidad del sueño, dos factores clave mientras sigues un programa de entrenamiento.
- Para la mayoría de las personas, un suplemento de magnesio o una dosis de ZMA, que es zinc y magnesio juntos, de 200 a 300 miligramos por día es suficiente.
El reconocido zinc
Es posible que el zinc no esté en los titulares como, por ejemplo, la vitamina D, pero debería ser de particular interés para ti como atletas por una razón: se pierde principalmente a través del sudor. En otras palabras, cuanto más entrenes y más duro, es más probable que seas deficiente en este mineral.
- Comer mariscos, carne, frijoles y semillas puede ayudarto a obtener una cantidad adecuada de zinc de su dieta.
- Los suplementos de zinc generalmente agregan otros 30 miligramos más o menos, lo que es suficiente para la gran mayoría de las personas. Tomarlo como ZMA, sería lo ideal como complemento a tu dieta.
La vitamina E, ¿siempre?
Ayuda al cuerpo a retener la masa muscular, especialmente durante el ejercicio intenso. Entonces, como era de esperar, dos de los síntomas comunes de una deficiencia grave son la debilidad muscular y la pérdida de masa muscular.
- Los culturistas de la vieja escuela eran conocidos por superdosificar las cápsulas de vitamina E, pero para la mayoría de nosotros, eso no será necesario.
- Probablemente puedas obtener suficientes calorías de las grasas saludables y asegurar una cantidad adecuada de vitamina E simplemente consumiendo fruto secos, o sus mantequillas y aceites vegetales (como el coco y la canola) como parte de tu dieta diaria.
La poderosa vitamina C
La vitamina C es una de las principales que necesitarás para la temporada de invierno, debido a que estimula tu sistema inmunológico y te ayuda a luchar adecuadamente contra el resfriado y la gripe.
También te ayuda a mantener huesos fuertes, desintoxica tu cuerpo, nutre tu piel y mejora la cicatrización de heridas, incluidas las que resultan del frio y sequedad extremos.
El siempre ponderado hierro
Además de ayudar a mantener fuerte tu sistema inmunológico en la temporada de resfriados y gripe, el hierro mantiene tu energía alta en el invierno, debido a que ayuda a transportar oxígeno por todo tu cuerpo y, por lo tanto, tus órganos funciona correctamente ya que están adecuadamente nutridos.
La absorción de hierro aumenta en gran medida con el consumo de vitamina C, por eso es mejor que acompañes tus alimentos con una limonada caliente o un zumo de naranja.
La necesaria vitamina A
La vitamina A es importante para la reparación de los tejidos y, por lo tanto, para el crecimiento y desarrollo de tu cuerpo, pero también participa en el fortalecimiento de tu sistema inmunológico y hacer que tus ojos y piel sean brillantes, sobre todo en invierno.
El calcio no debe faltar
Para tener huesos y dientes fuertes, el calcio es esencial, debido a que te ayuda a proteger los huesos, especialmente en invierno donde todo fluye con mayor complejidad para el sistema músculo-articular.
El calcio también es muy importante en la metabolización de las grasas. Especialmente durante estas fiestas, haría que se almacene menos grasa y se aproveche mejor los macronutrientes presentes en la sangre.
El selenio, ¿por qué?
El selenio es un mineral esencial que forma parte de las enzimas que intervienen en la defensa de tu organismo frente a los daños.
Es particularmente importante para fortalecer el sistema inmunológico y proteger tu próstata… pero, si entrenas duro y sigues una dieta con algunos que otros atracones, no siempre te recuperarás correctamente… aquí, entran en juego estas vitaminas y minerales de gran relevancia… ¿ya viste el vídeo?.
