Cómo mantener el flujo sanguíneo
El funcionamiento de cada uno de tus sistemas para mantener tu salud y rendimiento depende flujo sanguíneo adecuado.
Para tus ganancias también es muy relevante debido a que transporta oxígeno y nutrientes a cada célula, al mismo tiempo que elimina los desechos como el ácido láctico y el dióxido de carbono. Esto significa que para mantenerte activo, saludable y vital necesitas tener un buen flujo sanguíneo.
El hecho es que, muchas veces, un estilo de vida sedentario junto con malos hábitos hacen que éste se ralentice, causando problemas de salud, especialmente enfermedades cardiovasculares o desequilibrios nutricionales incluso, que pueden mermar el reparto de nutrientes.
¿Cómo debe darse el flujo sanguíneo?
Todo el proceso comienza en tu corazón, que bombea sangre rica en oxígeno y nutrientes a cada órgano, tejido y célula, a través de las arterias.
Una vez que se liberan esas sustancias vitales, recoge los desechos como el dióxido de carbono y el ácido láctico. Luego, con menos oxígeno, la sangre se transporta de regreso al corazón mediante las venas.
La fluidez con la que este proceso suceda, determina tu salud y vitalidad, puesto que mantiene tu cerebro en forma, tu corazón saludable e incluso le da a tu piel un rubor natural.
El flujo sanguíneo también afecta tu sistema inmune, ya que ciertas células sanguíneas transportadas ayudan a combatir las infecciones.
¿Qué provoca una mala circulación?
No solo los malos hábitos como fumar, la falta de ejercicio y la mala alimentación son los que causan una mala circulación sanguínea.
Es tan simple como que cuando tus músculos no se mueven, tu flujo sanguíneo se ralentiza y usas menos glucosa que se acumula en forma de grasa. Esto va causando otros problemas como las placas que obstruyen las arterias y el corazón, hipertensión y colesterol elevado.
Un flujo sanguíneo lento también hace que los líquidos se acumulen en las piernas, provocando venas varicosas, coágulos de sangre y trombosis, sin considerar que el paso de nutrientes se obstruye en cierto grado.
Cuando pasa esto, sentirás como hormigueo en los pies, frío en las extremidades, pies hinchados, sensación de agotamiento constante y la aparición de las primeras varices o “arañas vasculares».
¿Cómo mejorar el flujo sanguíneo?
Haciendo algunos cambios simples lograrás mejorar tu flujo sanguíneo y tu calidad de vida.
Puedes seguir estos consejos simples y pronto notarás avances positivos en tu salud y rendimiento.
Ejercítate:
- Correr, andar en bicicleta o caminar puede ayudar a estimular la circulación, y lo mismo ocurre con los estiramientos antes y después del ejercicio.
- Las diversas posturas de yoga calman el sistema nervioso naturalmente, lo que ayuda a normalizar la presión sanguínea, mediante la compresión y descompresión de las venas y arterias.
Toma infusiones e hidrátate:
- Bebe té negro o verde: sus antioxidantes ayudan a aumentar el ancho de los vasos sanguíneos para que tu corazón pueda bombear sangre fácilmente.
- Recuerda que debes hidratarte correctamente para que tu sangre tenga la consistencia perfecta y pueda fluir libremente.
Mantén una dieta equilibrada:
- Evita las grasas, los panificados, el exceso de azúcar y sal.
- Ve aumentando el consumo de frutas, verduras, hortalizas, proteínas saludables y frutos secos.
Supleméntate correctamente:
- Toma aminoácidos: como la arginina y otros compuestos, que generan óxido nítrico, crucial para mantener un buen flujo sanguíneo.
- Añade hierro a tu dieta: si no tienes suficientes glóbulos rojos para hacer circular el oxígeno hacia tus órganos y tejidos no podrás mantener la circulación de sangre que requieres para la salud, la contracción muscular y el paso de nutrientes a los diversos puntos, para un mejor rendimiento, recuperación o regeneración de tejidos musculares.
Por último deja los malos hábitos como las drogas o el tabaco, que destruyen las paredes de los vasos sanguíneos, haciendo que se acumule placa en las arterias.
Alimentos que mejoran el flujo sanguíneo
Además de estos consejos, puedes mejorar el flujo sanguíneo añadiendo estos alimentos a tu dieta.
Algunas hortalizas:
- El ajo, cuyos compuestos de azufre causan vasodilatación, aumentando el flujo sanguíneo.
- Las cebollas, cuyas propiedades antiinflamatorias combinadas con los antioxidantes flavonoides, se vinculan a una reducción de la inflamación tanto en las arterias como en las venas.
Ciertas especias:
- Los pimientos que contienen capsaicina, la sustancia que expande los vasos sanguíneos debido al óxido nítrico que contiene.
- La cúrcuma que posee su principio activo llamado curcumina, la cual ayuda a aumentar la producción de óxido nítrico, reduciendo el estrés oxidativo y disminuyendo la inflamación.
- El jengibre que dilata los vasos sanguíneos.
Los frutos secos:
- Las nueces y almendras están repletas de nutrientes como la vitamina E y L-arginina, que promueven la producción de óxido nítrico.
- El alto contenido de aminoácidos, y minerales como magnesio, potasio y calcio, pueden reducir la presión arterial y la inflamación.
Las frutas y bayas:
- Están repletas de antioxidantes, incluidos los flavonoides, que disminuyen la inflamación y ayudan con la rigidez de las venas y arterias.
Recuerda que, para afrontar el día a día con energía y motivación, es importante que cuides tu salud, permitiendo que todos los nutrientes que consumes lleguen oportunamente a cada parte de tus sistemas mediante un flujo sanguíneo saludable.
También tienes que procurar mantener los niveles de grasa lo más bajo posible. ¿Cómo?… aquí preparamos el siguiente vídeo con algunos consejos prácticos…
