Ventajas duraderas cuando se pierde peso rápido inicialmente

Publicado el 17 agosto, 2010 | Research

Se debe adelgazar realizando ejercicios y tomando buenos termogénicos acompañados de una dieta adecuada al tipo de físico

Si se pensabas que la mejor forma de perder y mantener peso era de forma lenta y sostenida, es mejor pensarlo de nuevo. Un nuevo estudio realizado por Lisa Nackers y sus colegas, de la Universidad de Florida en los Estados Unidos, sugieren que la clave para la pérdida y mantenimiento duradero de peso es perder peso en forma rápida, no gradualmente, en los primeros niveles de tratamiento de sobrepeso. Sus descubrimientos están publicados online en la Revista Internacional de Medicina de Springer.

Una pérdida de peso exitosa en individuos con sobrepeso es definida como una reducción del 10% o más del peso inicial mantenido por lo menos por un año. Además hay evidencia que perdiendo peso en forma lenta inicialmente resulta en pérdidas de peso continuas, un riesgo reducido de volver a ganar peso, y un exitoso mantenimiento duradero de pérdida de peso. Por otra parte, también ha sido demostrado que mientras más grade sea la pérdida de peso inicial en personas con sobrepeso, más grande será el total de peso perdido observado en una duración mayor.

La investigación

Nackers y su equipo de estudio examinaron la asociación entre el ritmo inicial de pérdida de peso y en cuanto tiempo se mantiene el peso perdido, buscando específicamente la evidencia que perder peso en un ritmo inicial lento resulte en una reducción de peso más duradera y con menos peso recuperado que perder peso a un ritmo inicial rápido.

El autor analizó los datos de 262 mujeres con sobrepeso de edad media que tomaron parte en el ensayo del tratamiento de sobrepeso en un escenario rural. Estas mujeres siguieron un programa de estilo de vida de 6 meses que promovía una reducción del consumo de calorías y un incremento moderado de la actividad física para alcanzar un promedio de pérdida de peso de 0.45 kg. por semana. Ellas fueron asistidas un año con un programa de atención extendido que tenía encuentros una vez al mes en la forma de grupos de sesión, contacto telefónico o boletines.

Nackers y su equipo dividieron a las mujeres en tres grupos de acuerdo a cuanto peso perdieron en el primer mes de su intervención. Las mujeres en el grupo RÁPIDO perdieron más de 0.68 kg. por semana; aquellas que estaban en el grupo MODERADO perdieron entre 0.23 y 0.68 kg. por semana; y las mujeres en el grupo LENTO perdieron menos que 0.23 kg. por semana en el primer mes. El autor después observó la pérdida de peso de las mujeres después de 6 a 18 meses, como así también cualquier peso recuperado.

Encontraron que había ventajas duraderas para el grupo de pérdida de peso inicial rápida. Las que perdieron peso rápido perdieron más peso en general, mantuvieron su pérdida de peso por más tiempo y no tuvieron mucha tendencia a recuperar el peso en relación a las que perdieron peso en forma más gradual. En particular, las mujeres del grupo RAPIDO fueron cinco veces más propensas a alcanzar el clínicamente significante el 10% de pérdida de peso en 18 meses comparadas a aquellas del grupo LENTO, y las del grupo MODERADO que fueron tres veces más propensas a alcanzar este hito que las mujeres del grupo LENTO.

Los autores concluyen: “Nuestro estudio provee evidencia amplia de que, dentro del contexto de un tratamiento sobre el estilo de vida, perder peso en un ritmo inicial rápido lleva a una buena reducción de peso a corto plazo, no resultando en una susceptibilidad incrementada de recuperar el peso, y está asociada con mayores pérdidas de peso y éxitos generales duraderos en el mantenimiento del peso. Nosotros sugerimos que, dentro de programas de control de peso en el estilo de vida, esfuerzos sustanciales deberían ser enfocados en promover grandes y no pequeños cambios durante las semanas iniciales del tratamiento.”

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