Feliz San Valentin, ¿entrenarán juntos?
Es hora de sumergirse en la relación entre el entrenamiento de resistencia y el deseo sexual, especial para San Valentín.
Para aquellos de ustedes que pueden ser tímidos con este tema, les advertimos que este artículo sobre San Valentín reconoce la existencia del sexo.
Comencemos con las buenas noticias. Para cualquiera que haya pasado de un estilo de vida sedentario a un programa de ejercicios o un plan de entrenamiento, los dividendos en el impulso sexual, la actividad sexual y la satisfacción sexual son significativos.
Los estudios han demostrado que las mujeres son más receptivas sexualmente después de 20 minutos de ejercicio vigoroso y que los niveles más altos de testosterona en los hombres, que se correlacionan con un mayor interés y comportamiento sexual, están relacionados con el ejercicio breve e intenso.
Sin embargo, los estudios han demostrado que demasiado ejercicio está asociado con una disminución de la testosterona y otras hormonas masculinas, lo que puede disminuir el deseo sexual. En las mujeres, demasiado ejercicio puede provocar la disminución de estrógeno y progesterona, dos hormonas importantes para el deseo sexual y la satisfacción.
A diferencia del entrenamiento de fuerza o los deportes de potencia y velocidad que liberan una gran cantidad de hormonas de crecimiento y otras hormonas «anabólicas» en el torrente sanguíneo, el entrenamiento endurance intenso genera mayores cantidades de cortisol y hormonas «catabólicas», lo que provocaría estragos en San Valentín.
¿Qué pasa con las hormonas?
Las hormonas anabólicas generalmente se asocian con un aumento del deseo sexual y sirven para sintetizar proteínas y facilitar el crecimiento muscular; ejemplos de estos incluyen la hormona del crecimiento, la insulina, la testosterona y el estrógeno.
Las hormonas catabólicas funcionan con el efecto contrario y erosionan el tejido muscular y disminuyen la inflamación; incluyen cortisol, glucagón, progesterona y adrenalina.
El cuerpo requiere cantidades similares de ambos tipos de hormonas para permanecer en homeostasis, pero los ejercicios de endurance (resistencia) producen muchas más hormonas catabólicas (cortisol) que hormonas anabólicas, suprimiendo la producción de testosterona en los hombres y agotando los niveles de estrógeno en las mujeres.
Entonces, ¿cuánto ejercicio de resistencia / endurance es necesario para disminuir el impulso sexual? Esta puede ser una respuesta frustrante, pero depende de algunas cosas.
- Si eres un atleta experimentado que optimiza la recuperación, sigue una dieta rica en grasas y vegetales saludables y evita los «kilómetros basura», es probable que no estés dañando mucho tu deseo sexual.
- Desde este punto de vista, no agotarías significativamente las hormonas anabólicas, ni aumentarías las hormonas catabólicas, en un grado dañino, permitiéndote rendir con tu pareja, sobre todo en San Valentín.
Ahora bien, si no estás priorizando la recuperación, añadiendo a una tarde una gran cantidad de azúcares complejos y carbohidratos, y haciendo mucho entrenamiento aeróbico lento y prolongado, es probable que tengas un deseo sexual mucho más bajo o ni siquiera lo pienses, lo que destruiría tus posibilidades durante este día especial de enamorados.
Pero, ¿qué hacer entonces?
¿Qué puedes hacer si eres un atleta de endurance con poco deseo sexual?
Entrena con más intensidad y menos volumen
- Prioriza el entrenamiento en intervalos de alta intensidad (HIIT) y el entrenamiento de fuerza como reemplazo de gran parte de Tu volumen.
- Cuando entrenas, realmentes solo necesita un entrenamiento «largo» por semana por disciplina (por ejemplo, si haces natación, bicicleta o una carrera de resistencia).
Sigue una dieta alta en grasas
- Las grasas son precursores hormonales y, en particular, las fuentes naturales de colesterol y grasas saturadas (como los aguacates, las aceitunas, la leche de coco, los aceites de pescado, el pescado y los cortes grasos de carne de res) impulsarán el proceso de producción de hormonas (sexuales) del cuerpo. .
Come carne, ¡ no lo olvides !
- La carne de res alimentada con pasto en particular es una excelente manera de aumentar los niveles de testosterona, especialmente si eres hombre.
Evita los alimentos procesados y el alcohol
- Los azúcares simples, alimentos procesados y el alcohol pueden agotar las hormonas naturales e introducir hormonas sintéticas en el cuerpo, lo que crea desequilibrios hormonales.
Aléjate del estrés en San Valentín
- No hay nada que agote las hormonas y afecte negativamente tu estado de ánimo como un día agitado sin descansos para respirar, estirarte y relajarte.
- Especialmente en el trabajo, tómate el tiempo durante este día para reducir la velocidad y hacer algo relajante, ya sea una siesta, una caminata, una sesión rápida de yoga o solo 5 minutos de respiración relajada y controlada.
Y, ¿algún suplemento para San Valentín?
Jamás uses la suplementación como una tira adhesiva; en su lugar, soluciona los problemas anteriores y, si tu deseo sexual aún es bajo durante este día especial, puedes intimidar a tu cuerpo y tu pareja con alguna ayuda extra.
Los hombres también pueden intentar usar ortiga, ácido d-aspártico, tribulis y magnesio, mientras que las mujeres pueden intentar usar arginina o ginseng.
Pero, independientemente a todo, haz una trampa y simplemente relájate, piensa en tu pareja y haz un encuentro con ella para la tarde del lunes, de modo a cocinar juntos, a tomarse el tiempo para disfrutar o simplemente ir al gimnasio a cargar la adrenalina necesaria para preparar una noche fantástica.
Un buen jugueteo con los hierros trabaja tu núcleo, caderas y sistema cardiovascular, lo que beneficiará al corazón, cerebro y producción de hormonas de ambos… Y, si quieres probar algún suplemento para la libido, adelante…
Algunos consejos extra ¿?
