El culturismo y el medio ambiente
En una entrevista muy interesante, Arnold Schwarzenegger lleva sus expresiones a un veredicto sobre el vegetarismo; empieza citando algunas cosas despectivas que tienen un eco en el colectivo; «siempre me ha parecido curioso que mientras que los culturistas y los vegetarianos quieren tradicionalmente las mismas cosas, una mejor salud y un cuerpo más en forma, no siempre se han llevado bien». Los culturistas vegetarianos se ven como débiles, pensando solo en el rechazo de la carne en sus vidas, mirando a los carnívoros como «cabezas cuadradas» que solo valoran los músculos sobre el bien del medio ambiente.
Ciertamente se siente culpable de llevar a sus amigos a consumir platos de crujiente granola en el pasado, o sentirse como un vegetariano cuando protagonizó filmes con Stallone durante las escenas de lucha. Lo que quiere decir Arnold es que su bravuconería machista puede ser solo parte del una película o de una fantasía de como se sienten los vegetarianos vs los carnívoros, porque no es realmente lo que siente por dentro. De hecho, hace unos buenos años, el mayor culturista de todos los tiempos está comiendo menos carne y está orgulloso de ello, porque aunque la carne sea una gran fuente de proteínas, no es la única, pudiendo conseguirse lo mismo a partir de combinaciones de frijoles y granos, además de los suplementos.
En este caso al comparar como afectará los objetivos dentro del fitness, según lo dicho por Arnold, los músculos no sabrán la diferencia, relacionando su comentario a Bill Pearl, que era vegetariano, y uno de los más grandes culturistas de la historia. En fin, los culturistas deben preocuparse por algo que es más grande que sus propios músculos, porque un deportista que entrena duro en la búsqueda del cuerpo diez, también puede construir su cuerpo beneficiando al planeta, y así vincular el culturismo y el medio ambiente.
En diciembre pasado, Arnold Schwarzenegger propuso «Lunes sin Carne», un llamado para que los que entrenan en todo el mundo se abstengan a comer carne por solo un día a la semana, recordando que el 28% de los gases de efecto invernadero provienen de la ganadería, por lo que reducir el consumo de carne incluso un poco puede tener un gran impacto positivo.
Fuente
- Flex OnLine News: Arnold opinion vegetarinism