Beneficios del aceite esencial de lavanda para la salud
Las flores de lavanda son aromáticas en la naturaleza y se han utilizado para la fabricación de popurrí durante siglos, su aceite es usado en la aromaterapia, y en muchas preparaciones y combinaciones que se pueden mezclar con otros aceites esenciales como el de madera de cedro, pino, salvia, geranio, y la nuez moscada. Los beneficios del aceite esencial de lavanda para la salud incluyen su capacidad para eliminar la tensión nerviosa, aliviar los dolores, desinfectar el cuero cabelludo y la piel, mejorar la circulación sanguínea y tratar problemas respiratorios.
Es importante saber que el aceite de lavanda nunca debe ser ingerido, solo se aplica o se inhala a través de medios de aromaterapia o por vía tópica; su ingesta puede causar complicaciones de salud graves, caracterizadas por visión borrosa, dificultad para respirar, ardor en los ojos, vómitos y diarreas.
Las multifunciones del aceite esencial de lavanda
Ayuda a tener un mejor sueño: induce el sueño, lo que puede ser una alternativa de tratamiento del insomnio; los estudios han demostrado un aumento en la regularidad del sueño, por tanto se puede cambiar la medicación por un poco de aceite esencial de lavanda en las almohadas, porque tiene un impacto tan relajante en las personas que es eficaz para hacer dormir profundo, y a los atletas culturistas, acelerar la recuperación muscular.
Regula el sistema nervioso: tiene un aroma calmante que le hace un excelente tónico para los nervios y los problemas de ansiedad, por lo tanto, también puede ser útil en el tratamiento de las migrañas, dolores de cabeza, depresión, tensión nerviosa y el estrés emocional. El aroma refrescante elimina el agotamiento nervioso y la inquietud mientras aumenta la actividad mental, incrementando el sentido cognitivo, y dentro del entreno, mejorar la conexión mente-músculos, incrementando el rendimiento en el gimnasio, o reducir la hormona cortisol, reduciendo los niveles de estrés.
Alivia los dolores: es conocido como un excelente remedio para diversos tipos de dolores incluyendo los musculares, el reumatismo, los esguinces, el dolor de espalda y el lumbago; un masaje regular con aceite de lavanda puede proporcionar alivio del dolor en las articulaciones, incluso superando las terapias de última generación.
Permite un mejor flujo de orina: es bueno para los trastornos urinarios, debido a su efecto estimulante sobre la producción de orina; además, ayuda a restaurar el equilibrio hormonal y reducir la cistitis o inflamación de la vejiga urinaria, evitando al máximo la aparición cualquier calambre asociado con otros trastornos.
Sirve para los trastornos respiratorios: es ampliamente utilizado para varios problemas respiratorios, incluyendo infecciones de la garganta, gripe, tos, resfriado, el asma, la congestión nasal, bronquitis, tos ferina, laringitis y amigdalitis; el aceite se utiliza ya sea en forma de vapor o se aplica sobre la piel del cuello, pecho y espalda. También se añade a muchos vaporizadores e inhaladores que se utilizan comúnmente para los resfriados y la tos, pudiendo aflojar las flemas y aliviar la congestión asociada con afecciones respiratorias.
Cuida el cabello: es útil para el cuidado del cabello, ya que ha demostrado ser muy eficaz contra los piojos; también es muy útil en el tratamiento de la pérdida del cabello, particularmente para personas que sufren de alopecia, una enfermedad autoinmune donde el cuerpo rechaza sus propios folículos pilosos.
Mejora la circulación sanguínea: la investigación sugiere que el aceite de lavanda posee efectos beneficiosos sobre la circulación coronaria, también reduce la presión arterial y se utiliza para la hipertensión, lo que significa que no solo los órganos aumentan los niveles de oxigenación, o la fuerza muscular; gracias a una buena circulación, la actividad cerebral que puede tener un impulso notable, la piel queda luminosa y bella, y sobretodo, se reduce la posibilidad de ataques al corazón.
Permite una mejor digestión: aumenta la movilidad de los alimentos en el intestino, estimula la producción de jugos gástricos y la bilis, ayudando así en el tratamiento de la indigestión, dolor de estómago, cólicos, flatulencia, vómitos y diarrea.
Fortalece el sistema inmunológico: el uso regular de aceite esencial de lavanda ofrece resistencia a una variedad de enfermedades, ya que sus propiedades antibacterianas y antivirales son cualidades que favorecen la defensa del organismo, inhibiendo la aparición de la tuberculosis, la fiebre tifoidea y la difteria, según algunas investigaciones.
Protege la piel: sus beneficios pueden atribuirse a sus propiedades antisépticas y antifúngicas; se utiliza para tratar diversos trastornos de la piel tales como el acné, arrugas, psoriasis, y otras condiciones inflamatorias, y es comúnmente usado para acelerar el proceso de curación de heridas, cortes, quemaduras, quemaduras solares, debido a que mejora la formación de tejido cicatricial.
Combate el acné: según los dermatólogos y los expertos en aromaterapia, es uno de los aceites más beneficiosos en el tratamiento del acné, que afecta principalmente a los jóvenes y atletas a medida que avanzan por la pubertad y utilizan ciertas sustancias sean químicas o naturales. El aceite esencial de lavanda inhibe las bacterias que causan la infección inicial, ayuda a regular la excreción del sebo por la manipulación hormonal, y puede reducir los signos de cicatrización del acné.
Es un excelente repelente: es un agente especial para combatir varios tipos de insectos como mosquitos, moscas y polillas; aplicar un poco de aceite de lavanda en la piel expuesta al exterior es ideal evitar las picaduras de los mismos, además el aceite de lavanda tiene propiedades antiinflamatorias que reducen la irritación y el dolor asociado con las picaduras de insectos.
